Barrio de San Marcos
El barrio de San Marcos es uno de lo smás antiguos de Quito, cuyo origen se remonta al siglo XVI, aproximadamente hacia 1580. Adquirió la categoría de parroquia en 1595 y dos años más tarde se autorizó la sede para su iglesia parroquial. Está estructurado por la calle Junín, conocida en tiempos coloniales como calle de San Marcos, en honor al que fuera el intérprete de San Pedro y que actualmente es el patrono de Venecia, en Italia, donde se dice que se encuentran sus restos desde el año 828 d.C.
La parroquia se estableció bajo la administración del tercer Obispo de Quito Fray Luís López de Solís de la Orden de San Agustín. A Solís se deben también las fundaciones de las parroquias de San Roque y Santa Prisca, la edificación de la iglesia de Guápulo y la fundación del Seminario San Luis y de los conventos de Santa Clara y Santa Catalina.
San Marcos tuvo como primer párroco a Martín de Gaviria, un clérigo mestizo aplicado en el estudio del Sacerdocio y virtuoso en el servicio de la Iglesia como señaló el vecino y visitador de Quito Juan Mosquera en 1576.
A inicios del siglo XVII, Lorenzo de Cepeda vendió su propiedad a varios compradores, entre ellos, las madres catalinas. Las religiosas establecieron su Monasterio hacia 1613 sobre una parte de la propiedad del conquistador español y, según Jurado, tenía como vecinos a Lorenzo de Escobar Garrido, Pedro de la Torres Simón Gásco de Quirós, Francisco de Oliveras y Juana Mosquera. La ciudad se fue poblando de españoles mestizos comerciantes y tratantes e indígenas, mitayos constructores aguateros, arrieros, artesanos, etc., cuyo trabajo respondió a las necesidades de la nueva sociedad colonial.
La cercanía a la plaza de Santo Domingo, conocida como la plaza de los tratantes, pudo ser uno de los factores para que a mediados del siglo XVII, la parroquia de San Marcos tuviera como moradores a españoles y mestizos, principalmente a comerciantes y clérigos.
Las pulperías no fueron la excepción en San Marcos. Hacia 1648, en la casa de Melchor de Villegas Santa María, junto al Convento de Santa Catalina, se ubicaba en la pulpería de Sebastián de Silva. Entre 1660 y 1691, funcionaban en la misma calle de Santa Catalina actual Flores, las pulperías de Juan de Vasco, Mateo Bohórquez, María Josefa mesa Rodríguez y Alférez Pedro de Sotomayor Cabrera; y el estudio de Soasti señala el funcionamiento de al menos una pulpería en San Marcos para 1694. De esta manera, se fue configurando el Barrio de San Marcos, un barrio de estrato cuyos moradores eran españoles, mestizos, clérigos, mercaderes, pulperos y artesanos. La vida parroquial apenas se estaba conformando en los años 1600.
Fue en el siglo XVII que ocurrió la consolidación del barrio San Marcos. Según la Guía de Arquitectura de la ciudad de Quito algunas casas de la calle Junín como la que perteneció a la familia Ortiz Bilbao y Mathias Abrams, fueron posiblemente construidas a finales de este siglo. Durante el siglo XVII, San Marcos albergaba a españoles, mestizos e indígenas. Sin embargo una característica especial del barrio durante esta época es la presencia de varios personajes vinculados con las gestas libertarias de 1809.
San marcos mantuvo su fisonomía colonial hasta el siglo XX. Hacia las primeras décadas se inician los trabajos de apertura y empedrado de las calle Inclina, Jijón, Texeira, Silva y de construcción de escalinatas, apoyados por mingas barriales. Para 1935 aparece la llamada “Primera Escalinata”, localizada entre la Junín e Inclina.
La actual fisonomía del barrio fue completada con el relleno de las quebradas Itchimbía y Manosalvas. Las quebradas al perder sus funciones originales, constituyeron un problema para la ciudad pues ocasionaban constantes accidentes e inundaciones debido a que en ellas se depositaban todo tipo de desechos. Los trabajos de relleno de las quebradas iniciaron ya en la época colonial pero se intensificaron los primeros decenios del siglo XX.
En 1950 se construyen varios multifamiliares que traen nuevos vecinos al barrio.
Hacia la década de 1970, los moradores crean el "Comité Barrial de Defensa" con el objetivo de recuperar el barrio y exigir a las autoridades de aquel tiempo atención a un espacio histórico que había sido abandonado. En 1991 se empezaron a organizar los comités barriales hasta que finalmente entre 2005 a 2006 el Municipio de Quito a través del Fondo de Salvamento (actual Instituto Metropolitano de Patrimonio), procedió con la recuperación de las fachadas de toda la calle Junín.
Fuentes consultadas:
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Peralta, Evelia y Moya Rolando. "Guía Arquitectónica de Quito" (2007). TRAMA Ediciones.
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Racines, Clara. "Propuesta de Mejoramiento Turístico de la Parroquia de San Marcos, como nueva alternativa turística del centro histórico de la ciudad de Quito". (2012). Universidad Tecnológica Equinoccial.
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Aguilar, Ana Belén. "¡San Marcos, una joya de la capital!" (2014). Diario Extra. Quito.
PATRIMONIO DE SAN MARCOS
Para los amantes del arte y el patrimonio, aquí están algunos de los talleres del barrio.
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Estudio 1984, Ropa • Mayah Cueva calle: 2283622 / mayah@lasanta.com.ec
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Taller Arte Colonial Quiteño, restauración, tallado • Marcelo Ruiz: 0983227393 / artecolonialqmruiz@hotmail.com
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Taller de Rodrigo Viera Cruz, pintura • 0998215339 / kespues_artcecontemporaneo@yahoo.com
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Taller de Bolívar Araujo, pintura • 0998307727 / boloaraujo@hotmail.com
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Taller de Guitarras, ebanistería • Gustavo Fajardo: 0998909645
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Casa Taller Galería, pintura • Sonia Rosales: 2281770 – 0995400428 / energizarte@hotmail.com
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Taller de Ricardo José Barrera, Taracea • 2280753
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Taller de Ernesto Proaño, artes visuales • 2283622 – 0984474453 / cadabrae@gmail.com
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Taller Aira, pintura y arte objeto • Melany Ponce: 2572900 – 0984911381 / Mel.ponce.ec@gmail.com
Fue fundado en 1592, por una viuda, Doña María de Siliceo, quien inició la congregación con sus tres hijas y seis huérfanas, bajo el amparo de la orden dominica y se instaló en una casa próxima a la plaza de Santa Clara. En 1608 tomaron posesión de las casas donadas por el conquistador Lorenzo de Cepeda, hermano de Santa Teresa de Jesús. Se encuentro sobre lo que en tiempos incas fuera el "akllawasi", o "casa de las escogidas". El monasterio fue concluido en 1613.
El presidente conservador Gabriel García Moreno fue asesinado en 1875. Misteriosamente sus restos fueron enviados a Francia para ser embalsamados y finalmente en 1883, tras su retorno a Ecuador fueron sepultados en secreto en el Monasterio de Santa Catalina, donde permanecieron hasta su descubrimiento en 1975. Mathieu Charles Guillory de Lousiana, EEUU, arrienda el espacio al Convento Santa Catalina desde mayo del 2011 donde funciona el Café Dios no muere..
Aunque la libertadora no vivió aquí, en esta casona del siglo XIX, el historiador Carlos Álvarez Saa restauró el inmueble con apoyo del FONSAL en 1994 para constituir un museo que contiene las cartas de Manuela Sáenz con Simón Bolívar, así como monedas, cuadros y armas del período de la independencia. Esta casa fue construida por el Arquitecto Antonio Russo en el siglo XIX y perteneció a Benjamín Piedra. En 1960 fue propiedad de la familia Romero Bravo adquirida al señor Clara Erazo.
Casa San Marcos fue construida originalmente en 1702 por el famoso arquitecto español José Jaime Ortiz. En 1920, la mansión fue dividida en dos y se construyó un muro a través del patio central. Por lo tanto, la gran escalera se divide así en dos también. Las habitaciones se mantuvieron en una parte de la casa y el área social en otro, en la casa actual. Entonces se pidió al famoso arquitecto Antonio Russo hacer reformas. En 2005 fue restaurada y convertida en hotel.
Aunque se encuentra cerrado temporalmente, el Museo de la Acuarela y Dibujo fue concebido como un espacio de difusión de la obra del artista y arquitecto Oswaldo Muñoz Mariño (1923-2016). A finales del siglo XIX la casa fue utilizada como vivienda – taller por las pintoras Brígida y Gertrudis, hijas del reconocido artista Antonio Salas. La casona colonial original del siglo XVII fue restaurada y convertida en museo en 2010.
En esta casona posiblemente colonial con una actual estructura de 1880, Jaime Burgos creó el Restaurante Gourmet La Octava de Corpus, dedicado a la cocina ecuatoriana e internacional.
Entre los siglo XIX y XX perteneció a la familia Benalcázar Camacho. Entre 1994 a 1997 fue restaurada y entregada a la Fundación Caspicara en 2001. Desde el 2010 funciona la Casa de la Danza dirigida por la bailarina Susana Reyes y su esposo Moti Deren.
Esta casa perteneció a Adolfo Carcelén Barreto, esposo de Rosa López Godoy. Aquí funcionó en 1890 la escuela pública de San Marcos a cargo de las institutoras Antonia Oña y Cleotilde Jaramillo. En 1989 el Directorio del Colegio de Arquitectos del Ecuador de Pichincha, presidido por el Arq. Rubén Moreira Velásquez, presentó el proyecto de restauración de la casona para la creación del Museo y Archivo de Arquitectura. Entre 1994 y 1995 Francisco Naranjo realizó la total restauración.
La Karakola, kasa de experimentación y konvivencia artística, es una plataforma de desarrollo artístico comunitario, investigación, producción y difusión de eventos, obras artísticas y salvaguarda del patrimonio intangible ecuatoriano que nuclea a diversos artistas y colectivos trabajando permanentemente además de plantear un punto de encuentro de artistas y creadores itinerantes. Fue creada en 2012.